En Mañana Oscuro, la evolución
del hombrees vista desde una distopía al
alcance de la mano, o más bien, del tiempo. La tecnología biológica crea seres
híbridos compuestos entre máquina y piel. A ratos la narración
nos acomoda perfectamente en el ámbito del film Repo man del 2010 dirigida por
Miguel Sapochnick. Los esfuerzos del hombre por cubrir la necesidad de
trasplantes de órganos o miembros derivan
en una política de modificación íntegra del ser humano devastando la naturaleza
esencial del mismo. Sin duda la
panorámica mundial expuesta por Gonzalo Fernández Bastías en Mañana
Oscuro, no se aleja de las consideraciones económicas que pudieron provocar la decisión
masiva de este hibridaje.
El título es una serie de relatos breves que van explicando cómo el ser
humano en su sociópata obsesión por superarse a sí mismo y potenciar sus
capacidades comienza a abandonar la esencia humana. Sobresale el texto
“Genocidio” historia que enuncia lo feble de la condición humana-ciborg, en
“Consecución” la sique humana se
corrompe a tal punto que deja entrever lo autodestructivos que potencialmente
somos. Fernández Bastías nos entrega vistazos amargos a un orden mundial
desnaturalizado y nuevas castas
socioeconómicas. La inclusión de monstruos conocidos, es decir, vampiros y
hombres lobo “Lycan” provoca un contraste marcado con la nueva “forma de ser”
humana. Como es de esperar surge un conflicto inherente al establecimiento de
este sistema deshumanizado. El tono, las visiones, resulta al lector una
especie de presagio al ritmo de los avances actuales.
Como en el pasado los relatos y la vigorosa narrativa de la ciencia ficción
fue nominada como “de Anticipación” lo que nos adelanta el autor de Mañana
Oscuro el punto exacto donde las sociedades consideran que nada es sagrado, que
el sistema cimentado enérgicamente a la ciencia es capaz de cubrir toda
necesidad, modificar todo proceso natural en una función específica y
tecnológicamente útil al nuevo orden. Parece un futuro poco distante. La meta
de alcanzar y conquistar los confines del universo requiere de una complexión
humana-ciborg, para superar las limitaciones que impone las debilidades del
cuerpo humano.
Este atisbo pesimista, conserva al momento de las conclusiones, las trazas
innegables de la condición humana, que a la altura temporal de Mañana Oscuro,
deja patente que aún no se deja atrás la esencia natural que a pesar de lo que
suceda, mientras vibre el latido de un corazón tierno en sus fibras, carne y
sangre, el ineludible deseo de combatir y oponerse subsistirá manifestándose.
La agilidad del texto acompañado por las impecables ilustraciones por parte
de Alex Olivares hacen de este título de Cathartes Ediciones una obra dinámica.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario