Sé que hay noches en que no concilias el sueño y los versos huyen por el bosque, te visitan
máscaras con buenos sentimientos, pero toda luz que traen es perecedera... hay
ecos y abrazos inexistentes, murmullos que cesan sólo si nos olvidas en un
instante. Alguien camina por los sótanos del alma conjurando los sueños, llevan
en su puño la última imagen nítida del recuerdo, noche vagabunda y embustera, entran por tu puerta mil voces que irán a dormir su estrofa falsaria. Tu
pensamiento se multiplica rojo y agónico
¿Qué escribes en medio de la nada, mientras te invoco? el camino eterno clama debajo de la piel y se asimila a la palabra tormento de no dormir ahora en tu regazo.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario