Siéntate Ágata
y ayúdame lentamente
a despertar de este sueño,
en esta orilla
la existencia es un largo capullo
donde retornan agudos dolores
Piénsanos Ágata
y toma mi mano
y borra mis destinos
en estos sólo soy un suspiro
un trepidar de llama
una locura disuelta
en el ancho mar de la vida
Ágata, si hay que liberar
libera
si hay que apretar el pecho
de esta ave que soy
hasta la muerte, hazlo...
si mientras hay que susurrar
para el camino final, no dudes.
Escríbenos Ágata,
quizás en el futuro
siendo amargamente otros
con otras existencias
nos detengamos frente a los
espejos,
seamos reflejos entonces
veámonos en un tiempo detenido
Suéñanos Ágata
hasta el cansancio
de un último segundo
exhaustas las campanas de la vida
detenido el metrónomo del destino
solos como siempre
y siempre unidos.
Por último, Ágata
olvida tu nombre y el mío
respira profundo limpiando tus
nuevos pulmones, suéñanos libres
piénsanos brillantes
escríbenos llenos de vida,
ámanos como el amor así lo hace.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario