domingo, octubre 23, 2011
CERO GLAMOUR DE MARKOS QUISBERT: HIPERREALISMO POETICO
En un país en que lo que predomina es la fachada de las personas, las malas diseñadoras se sostienen en glorias pasadas y lanzan una línea burda de vestidos, los periódicos se basan en la farándula y se comenta de cómo viste uno y otros en programas televisivos, donde los problemas de fondo se tratan como si fueran de forma “ Cero Glamour” de Markos Quisbert no cabria en la realidad chilena. La premisa de este poemario es un país que a todas vistas “debería” ser inexistente. Una realidad que NO DEBIERA EXISTIR.
Desde el “mal gusto” hasta el homo erotismo se mueven en los versos de Cero Glamour, un libro de cuatro partes; Peep Box, AP_NEA, Versos de adultez, Al Carajo. No hay líneas que lo separen los tópicos del autor se barajan de tal modo que los poemas no marcan hitos sino en la repetición de algunos versos, la serie TOMA (cinematográfica) es una línea diáfana, repetitiva y evolutiva que da uno de tópicos de la obra.
La visión de la calle, los amores furtivos y de índole gay no dejan indiferente a nadie, son viñetas que hemos visto, imaginado o escuchado de un modo u otro, está en nuestro acervo. El mundo de las apariencias desenmascarado, el verso abrupto descarnado hasta el punto de una honestidad actitud reaccionaria de algunos lectores, la respuesta lógica es que el creador que no es revolucionario, que no busca la transgresión, no ha escudriñado la verdadera entidad del espíritu humano.
Las imágenes están, ahora, Cero Glamour va más allá del Naturalismo a un Hiperrealismo, el lenguaje linda en lo coprolálico sin llegar a serlo se mezcla con elementos de lo cotidiano por lo que el lector puede familiarizarse de inmediato con lo sórdido de algunas escenas:
“Dos individuos sentados sobre un colchón
comen, beben cerveza
en calzoncillos. Ven películas porno.
Especulan de la vida
que deben tener estos actores.
Uno de ellos se masturba,
el otro come papas fritas y pollo:
ambos son hombres solitarios…”
O lo presencial y común que ya no debería asombrarnos se reviste de un interés distinto…
“Un señor de mostacho, camisa lila y short bermuda,
come en un restaurante/ del terminal de buses de Tacna-
Perú/
Degusta un lomo salteado con papas fritas, lleva gafas de
soldar sobre la frente/
Calcula un horizonte atestado de funcionarios y gente en
el control fronterizo/
Come, pareciera que estuviese en otra parte/
con un montón de circunstancias llevadas al hombro con
gusto/
Bebe cerveza en sorbos pequeños, mastica con
delicadeza el lomo/
y saborea cada hilacha de carne, cada grano de sal como
si fuera el último/
Saca una calculadora de su banano y un fajo de billetes/
Sonríe, se levanta y limpia su bigote con un rollo de papel
higiénico.”
Pero lo que resulta de todas las observaciones que va entregando el hablante lírico en sus versos es una crítica tajante a las costumbres de esta nación, de esta sociedad perfectible que debe corregirse desde las bases hacia arriba y los costados, en un sistema que agoniza y aún desea perpetuarse.
“Una voz que pide auxilio desde una ex-estación de
ferrocarril. La niña que quiere dar a luz después de la
fiesta. Un sujeto que es feliz con el cine argentino y toda
clase de pensamientos sobre la vida casera y el gozo de
cumplir años. En un pueblo rural hay señores que
observan el horizonte como si contemplasen más de un
sol. Ese anciano hace que todo se vuelva extraordinario
con tan sólo renacer de su orina. Una chica que lamenta
no ser un maniquí y los jugadores de pool ríen y
escuchan hard rock recordando que al día siguiente
deberán ser funcionarios que le cambiarán la cara al país.
La mujer de las tetas más grandes del mundo saldrá en
TV para convencer a los telespectadores de que tomen
leche y se dejen de tonterías.
Un anciano come porotos todos los días en el mercado
de Copiapó.”
Poemario interesante, poemas breves y tajantes, recomendable. Quisbert apuesta por la transgresión y logra su objetivo; impactar.
Etiquetas:
comentario literario,
poesía nacional
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markos, no sé si mi comentario te llegará, si vives en arica y estás, estuviste, solo de paso en santiago. Fue una suerte equivocarme de lugar y llegar hasta ti y tu libro. Todo el tiempo estoy leyendo nuevos libros de poesía, de gente joven y no tan joven, en general buenos y a veces muy buenos. Pero la cosa es que tu libro me ha impactado, lo fuerte, descarnado, estético, fino en su propuesta no ya irreverente, sino humana, aquello de lo humano que se evita mirar, mostrar, y en ese sentido no lo leo como hiperrealismo, tampoco expresionismo, hay algo nuevo y conmovedor -no es ni mucho menos feísmo- es poesía, y de la buena, un gesto nuevo ¡felicitaciones!!!
ResponderBorrarsoledad fariña
Gracias Soledad, en verdad yo tampoco estoy de acuerdo con eso del hiperrealismo, y si se llega a percibir eso en algunos poemas no fue una busqueda intencionada de hacer eso, que por lo demás lo relaciono más con la plástica que con la poesía. Fue solo por hacer más directa la situación y gráfica, pero no es algo que defina mi estilo. No me agrada que se asocie mis poemas a lo hiperreal, no me siento en esa búsqueda para nada, y tampoco fue mi intención definir lo homoerótico o gay, pues yo no categorizo en el libro ningún género sexual, intenté precisamente hacer lo contrario. tampoco busqué impactar, pero si él percibió eso que se le va a hacer, acá uno es libre de dar su impresión, lo que me parece bien,
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