incluso si optamos por no unirnos a ti, lo hacemos.
Recién me he dado cuenta de esta conscripción
donde el mármol de ninguno resalta;
de nada sirve tallar tu nombre en un árbol, intercambiar votos
o no pisar las grietas por la suerte
donde no hay anomalías estadísticas
& tú no sabes el día ni la hora, o incluso si lo sabes
timor mortis conturbat me. Sin duda
pensaríamos esto en un jet que se eleva & la caja negra
registraría cada grito individual infructuoso
pero lo que me exaspera es cuán obligatoria es ...
"nunca fue un miembro" escribieron en su tumba.
Al menos irse de juerga llega a ser heroico & puedo ver
por qué a los victorianos
les gustaba tanto dibujar escenas de lechos de muerte:
amontonados ante nuestro hermoso siglo, ellos sabían
de qué se trataban los nervios de la primera noche.
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